Anhely Torres Martínez, Directora General, Avita Servicios Geriátricos, S.L
Háblenos de su día a día…
Mi día a día es frenético. La comunicación y coordinación con el equipo es fundamental para conseguir los objetivos. En esta pandemia, como casi todo el mundo, nos hemos adaptado a una nueva fórmula de trabajo, donde la celeridad en la toma de decisiones es determinante. Nos hemos acostumbrado a estar con reuniones telemáticas y a adaptarnos y adaptar a los centros a numerosos cambios.
Afortunadamente esto se consigue teniendo un gran soporte, el equipo, y yo lo tengo.

¿Qué servicios ofrece AVITA y en qué lugares de la geografía andaluza tiene presencia?
Nuestra empresa Avita Servicios Geriátricos, tiene 8 centros. En la provincia de Almería en las localidades de Berja (capacidad de 136 plazas), Dalías (capacidad de 40 plazas), Albanchez (capacidad de 18 plazas) y Vera (capacidad para 120 plazas), esta última tiene prevista su apertura para este primer semestre de 2021. En la provincia de Granada, en las localidades de Baza (capacidad de 103 plazas) y Lanjarón (capacidad de 80 plazas). Hemos dado el salto a la provincia de Cádiz, en la localidad de El Puerto de Santamaría (capacidad de 180 plazas) cuya apertura tendrá lugar en este 2021; y saliendo de nuestra comunidad autónoma, en la localidad de Alalpardo (capacidad de 116 plazas), en la Comunidad de Madrid.
Podemos dividir nuestros servicios en dos grandes grupos: Servicios Generales y Servicios complementarios.
En los primeros, ofrecemos atención médica (Médico y enfermería), Fisioterapia, Terapia ocupacional, Psicología, Gimnasio todos ellos los siete días de la semana. Además, ofrecemos como servicios complementarios: Peluquería, podología. Nuestros centros disponen de un servicio de alimentación con menús validados por un nutricionista y en algunos centros, disponemos de menú a la carta
Las personas mayores son las más vulnerables ante la pandemia provocada por el Covid-19 ¿Cree que los gobiernos han sido injustos con este colectivo?
Probablemente sí. En esta pandemia sanitaria sin precedente, a las residencias de mayores se nos ha acusado casi de todo. Nuestro sector, el más afectado, se ha visto desamparado en cuanto a recursos. Hemos tenido que hacer un esfuerzo titánico para mantener a nuestro personal protegido, comprando EPIS a precios desorbitados. Hemos incrementado, de manera muy sustancial, las plantillas de trabajadores para atender las sectorizaciones de los centros.
Se nos ha señalado como imprudentes, y como los causantes de los brotes en las residencias, y, por ende, culpables de miles de fallecimientos de mayores. Es injusto. En las residencias de mayores se ha trabajado sin descanso, hemos tenido miedo a la incertidumbre y hemos dado lo mejor de cada uno de nosotros durante muchos meses.
Ha sido un año durísimo para nuestro sector, hemos hecho un esfuerzo sobrehumano por proteger las vidas de nuestros mayores y la salud de nuestros trabajadores. Creo que ha faltado concreción en las medidas adoptadas por las Administraciones públicas. Estas han sido tímidas, tardías e insuficientes.
La pandemia ha visibilizado la importante labor del sector de los cuidados a las personas ¿Será la palanca que impulse una mayor apuesta?
No sé si tras lo ocurrido aprenderemos algo como sociedad, dándole al sector el lugar que se merece. Al menos, espero que se dignifique más nuestro trabajo y al equipo de profesionales que día a día trabajan por y para hacer mejor la vida de los mayores.
Los trabajadores del sector merecen un respeto profesional y ha quedado sobradamente demostrado, aunque quizá solo se ha visibilizado en esta pandemia, que cuentan con la vocación, capacidad de trabajo, entrega, y profesionalidad como para que como colectivo tengan el lugar que se merecen.
En el sector de los cuidados es común encontrarnos con mujeres en puestos de dirección ¿Está más cerca romper el techo de cristal?
Todavía queda mucho por hacer, aunque si es verdad que en los últimos años la tendencia ha cambiado, y afortunadamente son más las mujeres que tienen acceso a un puesto de responsabilidad dentro de las empresas.
Es importante que se erradique la idea subyacente de que las mujeres se comprometen menos con las empresas, debido a las cargas familiares.
En este sentido, y para terminar de eliminar este lastre, queda mucho trabajo por hacer en lo que a igualdad se refiere por parte de las Administraciones públicas, así como por la sociedad para logar el cambio de paradigma.
Particularmente, esto no ocurre en mi caso ni en la empresa para la que trabajo, ya que el 90% del equipo directivo de la empresa lo conformamos mujeres, siendo una empresa gerenciada por hombres, y esto me lleva a pensar que el cambio en la tendencia a no ocupar puestos de responsabilidad por mujeres es posible.
¿Cómo es la realidad de la conciliación personal, familiar y profesional en el sector de los cuidados?
En este sentido, aún queda trabajo por hacer. Afortunadamente la tendencia ha cambiado y toma relevancia la importancia de la necesidad de la conciliación.
En nuestro sector, conformado muy mayoritariamente por mujeres, es el mejor ejemplo de esta necesidad. Se adaptan turnos que favorezcan la conciliación personal, familiar y profesional y se tienen en cuenta circunstancias especiales de nuestros trabajadores, para en la medida de lo posible favorecer tal conciliación.
Avita, tiene un fuerte compromiso empresarial con este modelo, entendemos que un trabajador se compromete con la misión de una empresa, si esta se compromete con la misión personal del trabajador.
Creo que el cambio de paradigma no solo es de los empresarios, sino que las Administraciones públicas tienen un trabajo por delante para que las empresas, sean del sector que sean, puedan llegar a implantar un plan de conciliación de manera sostenible.
En cuanto al futuro ¿Qué cambios necesita el sector?
Nuestro sector necesita algunos cambios, y para eso se hace necesario que las Administraciones Públicas se pongan mano a la obra para atender las sugerencias que desde hace años venimos solicitando.
Existe un problema de infrafinanciación. En Andalucía, los precios de las plazas concertadas están por debajo de otras comunidades. Esto hace que sean las empresas las que de manera privada soporten el coste de servicios para garantizar una mejor atención.
Además, se hace necesario una regulación autonómica o provincial del Convenio Colectivo de aplicación en nuestro sector, ya que como he mencionado los precios de las plazas los fija la comunidad autónoma y sin embargo, actualmente contamos con un convenio colectivo de ámbito estatal, lo que a todas luces, deja en posición de desventaja a empresas de nuestra comunidad.
También se hace necesaria la ampliación del concierto de plazas, ya que la demanda de mayores que precisan ayuda en centros residenciales es mayor que las plazas concertadas que se ofrecen.
Se hace necesario también que las Administraciones públicas entiendan, valoren y respeten la parte social de nuestro sector. En ocasiones nos tratan como si fuésemos hospitales, dejando de lado y restándole importancia a la parte social.
¿Alguna cuestión que quiera añadir?
Quiero aprovechar para dar las gracias a todos y cada uno de los trabajadores de Avita, hombres y mujeres comprometidos/as con su labor. Estamos muy orgullosos del equipo que tenemos y especialmente durante esta pandemia, han trabajado con el único objetivo de impedir que el COVID -19 pudiera entrar en nuestros centros, objetivo que afortunadamente hemos conseguido, no registrando en ninguno de nuestros centros mayores contagiados por este virus. Han demostrado entrega, profesionalidad, compromiso y mucho respeto hacia la situación que hemos y estamos viviendo. Se han adaptado a la multitud de cambios que se han implantado y lo han hecho siempre con la mejor de sus sonrisas y dándonos una lección de que el trabajo en equipo es lo que hace conseguir imposibles.
Han demostrado aquello de “Si quieres ir rápido viaja solo, si quieres llegar lejos ve acompañado”.